El Senado de la República aprobó hoy un
exhorto en donde se cuestiona a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales
(Semarnat) y a la
Comisión Nacional del Agua (Conagua) los permisos de cambio
de uso de suelo y las concesiones de agua otorgadas durante la administración
de Felipe Calderón a Hansa Baja Urbana, promotora del fallido proyecto español de Cabo Cortés [1],
informó el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda).
A través de un punto de
acuerdo el pleno del senado exhortó a la Semarnat -ahora a cargo de Juan José Guerra Abud-
que informe el estatus de la
Autorización de Cambio de Uso de Suelo para el Proyecto “Cabo
Cortés”, y se le solicitó a la
Conagua que informe el estatus de las Concesiones de agua,
toda vez que la
Autorización de Manifestación de Impacto Ambiental para dicho
proyecto fue revocada en junio del 2012. Asimismo, se le requirió a la
dependencia que reporte las afectaciones a los terrenos forestales realizadas
por la empresa HANSA Baja Investments, S. de R.L. de C.V., derivadas de la autorización
de cambio de uso de suelo antes otorgada.
“Es una buena noticia los
senadores de la nueva legislatura estén interesados en la protección de Cabo
Pulmo. El hecho que hayan presentado en
dos ocasiones el proyecto Cabo Cortés y ya no esté vigente no exime a los
promotores de responsabilidades, y por ello, deben ser sancionados. Además,
recordemos que Hansa todavía tiene una concesión para explotar 4.5 millones de
metros cúbicos de agua del acuífero de Santiago, suficiente para abastecer a
una pequeña población” dijo Agustín Bravo Gaxiola, coordinador regional de
Cemda en el Noroeste.
Cabo Pulmo, ubicado en el
Golfo de California, en las costas de Baja California Sur, es un patrimonio
ambiental de la humanidad así decretado por la UNESCO , la reserva marina
más exitosa del mundo, y un humedal Ramsar de importancia internacional.
Cabe señalar que el Cemda y
Greenpeace interpusieron recientemente una demanda ante la Procuraduría Federal
de Protección al Ambiente (Profepa) para que Hansa Urbana sea sancionada por incumplir
las condicionantes
de su manifestación de
impacto ambiental.
“El caso de Cabo Cortés no
ha terminado, es necesario que se haga justicia. Por ello en Cemda daremos
seguimiento a la denuncia interpuesta y seguiremos trabajando por la protección
del arrecife de Cabo Pulmo” finalizó Bravo.
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