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El embarazo en la adolescencia representa
un riesgo a la salud de la madre y el recién nacido porque el cuerpo de la
mujer no está preparado ni biológica ni emocionalmente para ello, por lo que
puede presentar diabetes gestacional y preeclampsia, mientras que el bebé puede
nacer de forma prematura y con una malformación congénita, destacó la doctora
Blandyna Avila Aguilar, Subdirectora de Salud de la Mujer.
Precisó que la edad más adecuada para
embarazarse se considera de los 25 a 35 años, etapa en la que además de
adquirir madurez física, se cuenta con estabilidad emocional para asumir la
responsabilidad de la crianza y educación de un hijo.
La doctora Blandyna Avila Aguilar, apuntó
que en la presente administración se está brindando especial atención al
problema del embarazo en adolescentes, por las implicaciones que esto conlleva
tanto para la madre como al bebe, las dificultades que ambos enfrentan y sobre
todo los riesgos de iniciar una vida sexual de manera anticipada.
Es por
ello que se trabaja intensamente en los consultorios amigables para
brindar orientación a hombres y mujeres que manifiestan inquietudes en torno a
su sexualidad, a fin de orientarlos e informarle sobre las consecuencias del
embarazo temprano.
Dijo que el trabajo es cotidiano para
hacerle ver a los jovenes de ambos sexos la necesidad de estar debidamente
preparados para asumir las responsabilidades del sexo, como lo son el cuidado,
alimentación y educación de los hijos, por lo que insistió en que la mejor edad
para pensar en el embarazo es de los 25 a los 35 años de edad.
A los veinticinco años tanto las mujeres
como los hombres han concluido su educación y cuentan ya con una preparación
para hacerle frente a la responsabilidad de criar un hijo y los riesgos de
complicaciones disminuyen considerablemente, reiterando La doctora Blandyna
Avila Aguilar, que el cuerpo de ambos así como sus emociones ya han madurado.
Explicó que la gestación antes de los 19
años aumenta cinco veces el riesgo de muerte materna, por lo que los programas preventivos de la
Secretaría de Salud, se difunden en las escuelas y a través de los foros para
interesarlos e involucrarlos en el conocimiento de su sexualidad y los riesgos
del embarazo en la adolescencia.
En cuanto a Baja California Sur, dijo que
el problema del embarazo en adolescentes se está atendiendo y existe confianza
en reducir la incidencia, toda vez que el compromiso con los jóvenes es brindar
una educación sexual desde la infancia para que durante la adolescencia cuenten
con información útil y adecuada que les permita evitar enfermedades de
trasmisión sexual y embarazos no deseados.
La Subdirectora de Salud de la Mujer,
manifestó que los resultados de los foros interinstitucionales en el estado que
permitieron a los jóvenes exponer sin restricciones sus inquietudes y dudas
sobre la sexualidad, están siendo analizados y darán la pauta para fortalecer
las acciones preventivas que hoy aplica la Secretaría de Salud en conjunto con
La Secretaria de Educación Pública, elemento valioso en esta tarea.
Finalmente convocó a las familias para que
al seno de sus hogares se pierda el miedo de hablar de reproducción humana, no
sólo en términos biológicos, sino emocionales, de esa manera se incrementa la
comunicación y permite darles oportunidades de un desarrollo más saludable y
que no estén expuestos no sólo al embarazo sino a adquirir infecciones de
trasmisión sexual.
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